INNOVACIÓN PARA EL TRABAJO REMOTO
Hablar de trabajo remoto si innovación es como tener un móvil de última generación sin acceso a Internet. Por una parte está la innovación, con su esquema de mejora continua y desarrollo constante, y por otro lado está el trabajo remoto con sus facilidades y beneficios para dar flexibilidad y movilidad a los empleados.
Volvamos a las años 70 cuando nace el concepto de trabajo remoto, con este se plantea la posibilidad de llevar el trabajo al trabajador, concepto que fue desarrollado más adelante con el apoyo de la tecnología y la democratización de internet.
En la actualidad, con la crisis generada por la pandemia del Covid-19, el mundo abrazó entre dudas y entusiasmo esta modalidad de trabajo. Que si bien no es nueva, podemos decir que no estaba adaptada para la mayoría de las compañías, las cuales sufrieron ante las dificultades para lograr tener una red de empleados conectados y eficientes.
Sin embargo, y como sucede en todas las crisis, las mentes creativas siempre encuentran mejores formas de hacer las cosas, y en muchas ocasiones el reinventarse permite que se den avances significativos en los procesos de innovación.
Para ejemplificar lo anterior tomaremos cuatro elementos claves en el desarrollo de la innovación en los ambientes de trabajo remoto. Estos elementos son: las herramientas tecnológicas, la cultura organizacional, el desarrollo de nuevas invenciones y la autogestión.
Las herramientas tecnológicas existentes como ZOOM, Microsoft Teams, WhatsApp Video Calls, Facebook rooms, Google Meet, entre otras. Han demostrado que pueden ser un aliado estratégico para el desarrollo de las actividades laborales de los empleados remotos. Sin su participación en esta ecuación seguramente los procesos serían un poco más tediosos o complejos de ejecutar. En especial cuando se trata de reuniones virtuales y talleres digitales.
La cultura organizacional cambió, explorando nuevos entornos en los cuales el control de tiempos, la presión de los jefes o incluso los espacios de interacción social dentro de la oficina, tuvieron que ser trasladados a las residencias de los empleados, garantizando el cumplimiento de las labores sin afectar la vida personal de cada uno. Sin embargo, en este aspecto las compañías tuvieron que efectuar modificaciones y flexibilizar un poco sus políticas internas, dado que ante la crisis es necesario ajustarse para no afectar ni ser afectados.
Siguiendo la línea anterior, entendemos que es difícil cambiar los hábitos de las personas o implementar una cultura de teletrabajo sin los valores organizacionales de líderes que caigan en errores como la microgestión o el abuso de los horarios. haciendo que la innovación no sólo tenga que materializarse a través de mejoras tecnológicas sino en la forma en la cual pensamos y capacitamos a los líderes de nuestra organización y a través de políticas, procesos y planes de formación
Por su parte, el desarrollo de nuevas invenciones juega un papel fundamental durante la pandemia porque es necesario desarrollar tecnologías, herramientas y sobre todo plataformas que permiten habilitar el potencial de las personas y sus labores. Un ejemplo claro de esto, es el sector de la salud, el cual ante la imposibilidad de tener a sus médicos atendiendo pacientes en los consultorios de los hospitales, decidieron llevar los hospitales a las residencias de las personas.
Esto, gracias a conceptos como el de videollamada médica o asistencia telefónica, que si bien no reemplazan una visita al personal de salud, les da posibles indicios para realizar triages y determinar prioridades ante la emergencia.
Por último en los elementos a evaluar tenemos la autogestión, la cual nos demuestra que podemos dar lo mejor de nosotros como empleados, sin la necesidad de tener un proceso de control o jefes pidiendo informes sobre nuestro rendimiento. En este punto, es muy importante generar una relación de confianza entre empresas y empleados, entendiendo que cada casa es un mundo diferente (en especial porque no se conoce la realidad de cada uno de los empleados) y atendiendo a la importancia de cumplir de manera responsable con los compromisos que se determinen a nivel laboral.
Con estos cuatro elementos en el plano, podemos afirmar entonces que la innovación no sólo está ligada al desarrollo de nuevos conceptos técnicos o herramientas de última tecnología. Sino también que se debe innovar en los procesos, las estrategias, la gestión tanto de tareas como la autogestión de los empleados, la tecnología por supuesto y la comunicación.
Es por esto que la Innovación en el trabajo remoto permite integrar la tecnología y la transformación digital para la solución de las necesidades de la compañía y sus empleados. Generando valor en la distancia, dando cumplimiento de los compromisos y por supuesto, creando nuevas formas de que la relación gana – gana entre empresa y empleado sea mucho más fuerte.
Finalmente quiero terminar este aporte invitando a continuar los procesos de autoformación, pensamiento crítico, cuestionamientos y sobre todo desarrollar la creatividad e innovación que cada uno de nosotros puede usar para aportar grandes ideas las compañías en las cuales laboramos.
Foto de portada por Andrea Piacquadio desde Pexels